LA DIGITALIZACIÓN DEL eBL EN EL COMERCIO INTERNACIONAL: VENTAJAS Y DESAFÍOS EN LA NUEVA ERA COMERCIAL
En un mundo cada vez más interconectado a través de medios digitales, la industria del transporte marítimo está experimentando una transformación profunda: la digitalización de la documentación comercial. Uno de los cambios más notables es la adopción gradual del Bill of Lading electrónico (eBL), una innovación que promete simplificar y agilizar los procesos comerciales a nivel global.
El eBL, un documento que históricamente ha existido en formato papel, ha sido ampliamente aceptado en el ámbito del comercio internacional. Su utilidad abarca a todas las partes involucradas en este entorno, desde propietarios de carga hasta bancos, pasando por aduanas y líneas navieras. Su naturaleza de interoperabilidad ha sido un pilar fundamental en la maquinaria del comercio global y replicar esta conexión en el ámbito digital es un aspecto clave para la exitosa implementación del eBL.
Sin embargo, este proceso no está exento de desafíos. Diferentes proveedores de soluciones tecnológicas abordan la digitalización de manera individual, lo que podría generar la aparición de múltiples formatos exclusivos para plataformas específicas. Este escenario podría dar lugar a la fragmentación y la falta de coherencia, en contraposición a la colaboración que se busca. Superar este obstáculo requerirá la implementación de estándares tecnológicos unificados, que todos los actores involucrados estén dispuestos a adoptar.
El objetivo de alcanzar una adopción del eBL del 100% para 2030 es una meta ambiciosa que trasciende la simple digitalización del conocimiento de embarque. La clave para lograrlo radica en la digitalización de todos los documentos comerciales que acompañan las transacciones internacionales. A pesar de las ventajas evidentes del eBL, como la seguridad, rapidez y eficiencia, la adopción completa podría encontrarse con obstáculos en la forma de documentos en papel, como certificados de origen y salud.
El desafío más significativo radica en la colaboración e interoperabilidad entre múltiples partes interesadas: propietarios de carga, líneas navieras, bancos, aduanas y reguladores. Además, la transición hacia la digitalización integral debe abordar la cuestión de la documentación respaldatoria que todavía se emite en papel.
Las ventajas clave de la digitalización del eBL son diversas y poderosas. En primer lugar, se encuentra la seguridad, ya que se elimina el riesgo de pérdida, falsificación o fraude de documentos. Además, la rapidez es un atributo fundamental, ya que la transferencia de documentos se realiza en cuestión de momentos en lugar de semanas. A nivel ambiental, la sostenibilidad es una ventaja destacada, contribuyendo a la reducción de la huella de carbono al eliminar la necesidad de papel. La simplicidad de uso es otro punto a favor, con plataformas intuitivas accesibles en cualquier momento y lugar. Por último, la eficiencia de costos se hace evidente al reducir tarifas de mensajería, aligerar la carga de trabajo y eliminar la necesidad de procesar y almacenar documentos físicos.
La adopción del eBL representa el primer paso hacia una transformación más amplia en la documentación comercial, según expertos. La digitalización promete acelerar procesos, aumentar la seguridad y contribuir a un sector de transporte marítimo más eficiente y sostenible en un mundo cada vez más digitalizado. En este camino, la colaboración y la adopción de estándares compartidos se presentan como elementos esenciales para superar los desafíos y garantizar un futuro exitoso para el comercio internacional en la era digital.